Es muy común que se crea que la edad es una variable que favorece la aparición de la insulino resistencia pero también se ha advertido que al envejecimiento lo acompañan frecuentemente otros factores asociados como la inactividad física y la obesidad.
Insulino resistencia y envejecimiento
Todavía no está del todo claro que la acción de la insulina disminuya sólo por un factor de orden cronológico.
Incluso se vieron contrastes favorables en personas mayores con estilo de vida muy activo, frente a individuos jóvenes adultos sedentarios (Berntorp, K.; Eriksson, K.F.; Lindgarde, F.,1986).
Otros estudios consiguieron establecer que los efectos negativos de la intolerancia a la glucosa adjudicados a la edad disminuyeron notablemente casi hasta la eliminación total, una vez que los sujetos estudiados modificaron la obesidad y el sedentarismo.
Por tal razón se estima que el efecto del envejecimiento sobre el desarrollo de la insulino resistencia es secundario a la inactividad física y a los cambios en la composición corporal (Zavaroni, I.; Bonora, E.; Pagliana, M., 1989).
A su vez, deportistas veteranos que experimentaron retrocesos en la tolerancia a la glucosa morigeraron su situación a causa de los programas de entrenamiento desarrollados.
Asimismo, se especuló que la situación de intolerancia se debía a una predisposición genética para desarrollar diabetes mellitus. Sin embargo ésta no llegaba a manifestarse gracias a la regularidad con la que se ejercitaban (Rogers en: Bjöntorp, P., 1992).
Es preciso tener en cuenta que los niveles plasmáticos de glucosa e insulina de los individuos mayores de edad son generalmente más altos que los de las personas jóvenes. Aún en mayores cuya tolerancia a la glucosa se encuentra dentro de un rango normal.
¿El ejercicio puede ayudar a mejorar la resistencia a la insulina?
En los jóvenes el entrenamiento físico mejora la acción de la insulina mientras que en personas mayores con tolerancia normal no tiene ningún efecto específico.
Sin embargo, en aquellos con un deterioro en la tolerancia a la glucosa, el ejercicio parece ser beneficioso, cuando alcanza una adecuada intensidad (Dela, F.; Ploug, T.; Handberg, A., 1995; Ruderman, W.; Devlin, J.T., 1995).
Otro estudio observó que individuos mayores con intolerancia a la glucosa mostraban una marcada mejoría en la respuesta a una carga de glucosa oral después de un año de entrenamiento intenso.
Esta mejoría en la tolerancia a la glucosa ocurrió a pesar de la significativa disminución en la respuesta insulínica al test con glucosa (Holloszy, J.O.; Coyle, E.F., 1984; Clark, J.O.; Patrick, D.L., 1995).
Conclusión
Todavía no hay pruebas concretas que indiquen que con el correr del tiempo las personas generen insulino resistencia. Pero lo que está claro es que un estilo de vida activo junto a una dieta equilibrada lograrán frenar la aparición de esta enfermedad crónica.
Espero que el articulo te haya servido. Si tienes de como entrenar o alguna consulta sobre entrenamiento para prevenir y/o tratar las enfermedades metabólicas, comunícate con nosotros para que podamos ayudarte.